Marzo
Nunca pensé que después de haber escrito dos novelas sobre la guerra, en este caso de Malvinas, hoy estuviera sintiendo ese vacío de corazón inhumano y desapacible, la incertidumbre de no saber, de no haber aprendido nada, de quedarme a oscuras con preguntas sin respuestas.
Y el dolor tan profundo,
la soledad en los gritos de nuestros hermanos que lloran...
La guerra es nada, no sirve, acumula angustias inocentes de seres que no entienden tanta maldad humana.
Y cuando se va deja cenizas que se vuelan con la primera brisa, silencio, ruinas, impotencia, cielo devastado, tormenta que no cesa, nubes grises y eternas.
¿No aprendimos nada a lo largo de los años y de los siglos?
Sordos al dolor del otro, siguieron combatiendo por ideas estériles, con el alma hecha muro, piedra caliza, frente a los ojos húmedos de los niños heridos por fuera y más por dentro.
Niños que sueñan con un futuro, que buscan la risa, que enfrentan el miedo, sin comprender, bajo la lluvia de las balas.
No hay nada que la guerra haya conseguido que no hubiésemos podido conseguirlo sin ella. (Havelock Ellis)
Marzo aparece desierto porque hemos quedado desolados, con un deseo de esperanza demolido frente a otro dolor que nos sacude el corazón.
La palabra PAZ parece tener tres letras... nada más.
Grande es la culpa de una guerra innecesaria. (John Adams)
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La humanidad ni ha aprendido la lección ni jamás la aprenderá pues siempre surgirán bestias malignas que provoquen las guerras para sus propios intereses sin importarles la muerte de inocentes. Y encima estas bestias malignas tienen seguidores que les aplauden y les obedecen en todo lo que les manden. Que Dios nos ayude a conseguir esa PAZ tan deseada por toda persona de bien.Besicos
ResponderEliminarTe mando un beso y te deseo un buen mes. Aunque con lo de la guerra desgarra el alma.
ResponderEliminarLuján, suscribo todas tus letras, amiga. He estado paralizada durante unos días sin poder escribir, ni pensar nada. Pendiente de las noticias, presa del pánico y de la angustia que las imágenes me provocaban. La guerra es una locura de la mente que ha dejado de ser humana y se ha convertido en diabólica. Dios quiera, porque todos lo estamos pidiendo, que esto acabe pronto, porque la pandemia ya nos ha hecho mucho daño...Todo nuestro cariño y apoyo a los ucranianos.
ResponderEliminarTe dejo mi abrazo entrañable y mi ánimo, amiga.