Todos los gritos fuertes nacen de la soledad
Labels:
El silencioso grito de Manuela---Luján Fraix
·
Luján Fraix
Luján Fraix
a la/s
octubre 27, 2020
Manuela niña-mujer.
Ella le temía al futuro mientras vivía en el pasado. No podía desprenderse de sus fantasmas interiores y por ello tampoco podía crecer. Se lamentaba, rezaba rosarios enteros... Con la ansiedad propia de quien esperaba cosas que quizá no iban a suceder. Y así vivía, sin reparar en sus hijas, olvidando sus obligaciones y esperando que otros ocuparan su lugar.
La vida la fue acercando a ese futuro y le dio la razón. El miedo la abandonó en sus últimos años porque ya todo había sucedido...
El grito silencioso, el que no puede salir porque le teme a la libertad.
El silencioso GRITO de Manuela
SEGUIR LEYENDO---
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Adoro esa novela , te mando un beso
ResponderEliminarGracias querida Citu.
EliminarUn abrazo.
Me sobrecoge dos de tus afirmaciones: "Todos los gritos fuertes nacen de la soledad" y también ese grito que no puede salir " porque le teme a la libertad." No es fácil llegar a estas conclusiones si no se trata de una persona muy madura, muy vivida. Mi felicitación sincera, Luján.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Francisco, qué hermoso elogio.
EliminarEs que soy muy observadora, me encanta analizar las conductas humanas. Mis novelas van por ese lado.
Un abrazo fuerte.
Interesante fragmento de tu novela.Besicos
ResponderEliminarGracias querida Charo.
EliminarUn abrazo grande.
Triste vida de aquel o aquella que viven pendientes de sus fantasmas interiores, Luján. Es importante hacerle frente a nuestros miedos y atrevernos a ser optimistas y no dejarnos llevar por pensamientos negativos. La vida empieza cada día y cada día es una nueva oportunidad para crear y recrear la vida. Admiro tu capacidad para dar vida a esta mujer, reflejo de otras mujeres que así han vivido y viven, amiga. Te felicito por tu temple y sensibilidad a la hora de describir el alma atormentada de Manuela.
ResponderEliminarTe dejo mi abrazo y mi cariño siempre, Luján.
Bonito fragmento de tu libro. Feliz fin de semana. Besos.
ResponderEliminar